TODAS LAS SALIDAS DE PAPALIMASIERRA

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* Pico el Nevero (circular) - Febrero 2012
* Pto. NAVACERRADA - BOLA DEL MUNDO - MALICIOSA Enero de 2012
* MONT BLANC (Primera parte) - julio 2011
* MONT BLANC (Segunda parte) . julio 2011
* ANETO (Normal por la Renclusa) - mayo 2011
* MTB Cercedilla - Segovia - mayo 2011
* MALICIOSA (Cara Oeste) - Abril 2011
* PEÑALARA (invernal circular) - febrero 2011
* PEÑA EL ÁGUILA - Febrero 2011
* PEÑA EL ÁGUILA "Fallido" - Enero 2011
* PICO EL NEVERO (Ruta no circular) - Noviembre 2010
* PICO LA PINAREJA - Noviembre 2010
* COTOS -BOLA DEL MUNDO - VALDEMARTÍN - CABEZAS DE HIERRO - COTOS - Octubre 2010
* MALICIOSA (desde la Pedriza) lineal hasta BOLA DEL MUNDO Y NAVACERRADA - Octubre 2010
* PEDRIZA (Cabaña de madera) - Septiembre 2010
* 7 PICOS (Vuelta por Senda Herreros y variante nueva) - Abril 2010
* 7 PICOS INVERNAL "Fallido" - Marzo 2010
* PICO MAJALASNA - Febrero 2010
* ALMANZOR por la normal, haciendo noche en el refugio Elola - Setiembre 2009
* Circular PEÑOTA y PEÑA ARCIPRESTE desde Cercedilla - Abril 2009
* MALICIOSA (Barranca - Collado Piornal -Cumbre) - Marzo 2009
* COLLADO DE LA VENTANA - Marzo 2009
* MONTÓN DE TRIGO Invernal (vuelta por Poyal de la garganta) - Enero 2009
* CERCEDILLA - NAVACERRADA (Invernal por varias rutas) - Enero 2009
* MALICIOSA (Invernal fallido por Cara Sur por alguno de los canales, sin saber precisar cual) - Diciembre 2008
* PEÑALARA invernal Ida y Vuelta - Noviembre 2008
* YELMO - noviembre 2008
* Camino Schmid Navacerrada - Cercedilla - Noviembre 2008


lunes, 25 de octubre de 2010

COTOS-BOLA DEL MUNDO-VALDEMARTIN-CABEZA DE HIERRO MENOR y MAYOR-COTOS

DISTANCIA RECORRIDA: 18 Km. TIEMPO EMPLEADO: 6 horas incluyendo descansos y comida. DESNIVEL POSITIVO ACUMULADO: 996 metros PUNTO MÁXIMO DE ALTURA ALCANZADO: 2380 m. en Cabeza de Hierro Mayor.
Una semana más y aquí estoy, nuevamente escribiendo en este pequeño rincón de la red, en el que plasmamos nuestras pequeñas aventuras serranas... y ya van tres libranzas seguidas, por favor!!! que no decaiga, que ya han anunciado los primeros copos blancos en las cumbres madrileñas, Chicos, empieza lo bueno... y nuestras chupas de palo siguen sin llegar jajaja.

La teoría de que las rutas muy planeadas se truncan facilmente, se vuelve a cumplir, aunque bueno, parcialmente. Fuimos siete, que no esta nada mal, pero hubo dos bajas de última hora, el Jorgito y sus obligaciones paternofiliales y el Toni, que se tenía que ir a disparar a unos pobres conejillos... otra vez será y al haber completado esta ruta, oficialmente soy el integrante de Papa Lima Sierra, que más rutas ha completado, ya que sólo he fallado en una y con la falta de Toni, se rompe el empate y el ya ha fallado dos. Toni, te va a tocar pateartelo tú sólo jejeje

El objetivo del día era ambicioso, largo, con cuatro cumbres de más de 2.000 y con seis o siete horas de pateo por delante. Se sumaba una nueva integrante Gema, que de la mano de Pico, formaba la otra pareja del grupo, ya que además se volvían a reincorporar a las rutas el Lucas y Maribel, aunque por poco tiempo, ya os contaré el porqué.
La hora las 08:00 en el curro y el punto de partida, uno no muy habitual, el parking de Cotos, de donde ya partimos el día de la ascensión a Peñalara. Por lo tanto, el lugar del desayuno, tenía que cambiar y fue Jon, quien optó por una Gasolinera, ya en la carretera del Puerto de Navacerrada, para recordar sus viejos tiempos en la Cruz Roja de Montaña.

Entre unas cosas y otras, eran más o menos las 11:00 cuando una vez ajustadas las botas, colgadas las mochilas (bueno el caballero de Pico, cargo la de su chica), nos poníamos a patear en dirección a la Loma del Noruego. Esta parte de inicio, se adentra en la ladera de Guarramillas, dejando a la derecha la Carretera por la que veníamos y a la izquierda las pistas de Valdesquí. Tenemos que admitir, que hubo un momento de perdida y unos trescientos metros de regalo, que tuvimos que desandar, pero tras varias incursiones entre la maleza, pudimos dar con un camino muy marcado, que con el día tan desepejado que hizo, se observaba perfectamente que subía hasta el alto de las Guarramillas o Bola del mundo.

Llevábamos apenas 20 minutos caminando, cuando Lucas empezó a sufrir de sus ampoyitas... Compeeds, tiritas, calcetines nuevos y el Lucas que parecía Chiquito de la Calzada andando y que no podía más. Barajó la posibilidad de darse la vuelta, pero bien aconsejado, optó por seguir hasta la primera cima del día, Bola del Mundo, para desde ahí bajar a Navacerrada y o bien esperarnos allí o bajar en tren a Cercedilla.

No sé concretar las horas, pero un tiempo después y con una subidita que ya empezaba a hacer mella en las piernas (sobre todo en su parte final), nos plantábamos en la Cima de Guarramillas 2258 m. de altitud, a unos metros de las antenas de Bola del Mundo y junto a una especie de viejo Pluviometro, en el que están talladas todas las cumbres de la Sierra Madrileña y que según Pico y Jon, grandes conocedores de la Pedriza, se equivoca a la hora de señalar el Yelmo.
Aquí es donde nuestros caminos se separan, unas fotitos de despedida y Maribel y Lucas tiran a la derecha, en dirección a las antenas antes mencionadas, con el fin de descender por la carretera que bajamos en la ruta de la semana anterior. Nosotros sin embargo, continuamos a nuestra izquierda, sin perdida alguna con tanto sol, por la línea de cumbres, para empalmar con Cuerda Larga, que desde Maliciosa, hasta la Morcuera, flanquea estas montañas.
La siguiente meta del día es el Cerro de Valdemartín, con sus 2282 m. de altura. Para ello, primero había que bajar al Collado de las Guarramillas (2139 m.) y posteriormente, subir por una ladera que se antojaba sencilla, sin piedras y por un camino muy pisado. Lo de que se antojaba sencilla, era una ilusión que yo tenía, porque efectivamente, por el aspecto, digamos, poco montañoso y lo cercana que se veía la cumbre, eso parecía, pero a mí se me agarro un buitre en la espalda y el pajarón que pillé, me hizo echar las muelas un poquito. No muy lejos de mí, iba el Sr. Pico, que con tantos km. en sus piernas (como le gusta correr al tío), también iba un poquillo fastidiaillo... y menos mal que me metí un poco de droga en forma de barrita, si no, no sé que hubiera sido de mí. Más alante Jon, Dani y Gema, subían como unas máquinas.

Poco tiempo después ya estábamos en lo alto del cerro. Apenas un trago de agua y lo despejado y poco atractivo de la cumbre, no invitaba a quedarse más tiempo, así que sin pensárnoslo mucho, descendíamos nuevamente al Collado ahora conocido como la cumbre, es decir, el Collado de Valdemartín (2153 m.).

Desde este punto, quedaba la parte a priori más dura de la ruta, una dura subida, que poco a poco, se iba haciendo más escarpada, con un aspecto muy montañero y que se asemeja con la parte final de nuestro querido Almanzor. Ascender entre grandes bloques de piedras, teniendo que poner mucha atención en donde dar el siguiente paso. Poco a poco y con cuidado nos plantamos en Cabeza de Hierro Menor y sus 2228 m. de altitud. No existe vertice geodésico como tal, ya que éste se encuentra en la hermana Mayor, pero un par de palos, con unos jirones de tela, te indican de alguna manera que estas en la cumbre. La parada en este caso, fue algo más larga, además el lugar acompañaba y las piernas lo pedían a gritos. Cada uno acomodado en su roca, un poco de agua, unos futos secos de esos de "me dan to´la vida" y las fotitos y algún video de rigor.

A partir de aquí y ya cerca de las 14:30 de la tarde, había que plantearse la hora de la comida y la organización de lo que quedaba de ruta. Así que con mucho acierto, creo, decidimos bajar al Collado que separa ambas cabezas, dejar allí las mochilas y acometer la última pequeña subida a Cabeza de Hierro Mayor, libres de peso, para bajar posteriormente de nuevo y comer allí.

Bajamos primero la menor, por una zona muy, muy escarpada, teniendo que hacer pequeños destrepes y donde nuestros dos acompañantes caninos, lo pasaron peor. Luego nos quitamos las mochilas (como dije en la entrada de la semana pasada, por encima de 2.000 metros, no hay que tener miedo a robos) y acometimos la pequeña trepada al último objetivo del día, Cabeza de Hierro Mayor y sus 2.380 m. de altitud. Fotito de cima (sí o sí, hay que hacer la bandera) y para abajo, que el hambre llamaba y el tiempo se nos echaba un poco encima, ya eran más de las 15:00.
Una comidita rica, rica, caldito de mi mujer y yo tenía que estrenar mi infiernillo, que ya no llevo la cocina de la semana pasada. Sandwiches, embutido, mis guisantes, fruta y ole, ole y ole, fuerzas respuestas, un pequeño reposo y para abajo. El descenso, sin camino marcado, ya que son piedras sueltas de diversos tamaños, se hace por el hueco natural que hacen ambas cumbres, hacía una zona que he podido saber que se le conoce como el Canchal, para posteriormente dejar a la derecha una pequeña protuberancia, metiéndonos en una canal natural, en el Circo de las Cerradillas, para por donde mejor podamos, descender hasta el arroyo del mismo nombre y pegado a éste seguir descendiendo hasta encontrar los hitos y las marcas del PR 27.
Este camino, que ya se empezaba a hacer un poquito pesado, con tanta piedra, cruza hasta tres veces unos pequeños afluentes del arroyo de las Cerradillas. Después de estos riachuelos, el camino se hace camino de verdad y siguiendo las marcas blancas-amarillas, ya entre árboles, nos va acercando a la civilización o más bien a "raros ejemplos de ella", primero una rumana, en chandal y zapatillas, con una pera en la mano y que se estaba adentrando en el camino y eso que no quedaba mucho tiempo de sol, pero he buscado en las noticias y no he visto nada. Luego una familia disfrutando del río y por último, un moro, al que le preguntamos por el Refugio de Pingarrón y nos contesta -¿Qué es un Refugio?.

El refugio, tras cruzar el Arroyo de las Guarramillas por un puente, quedaba un poco a la derecha, pero las piernas no pedían ir al refugio, supuestamente de frente, se salía a la carretera que lleva a la estación de esquí y si la cogíamos a la derecha, nos llevaba de nuevo al coche. Y así fue, ignorando el refugio y ya estando un poquito hasta los cojones, nos plantamos en la carretera, que al rato, nos llevó hasta el aparcamiento de Cotos y a nuestro coche.

Cambio de ropa, a comprar unos aguas y unos aquarius y a observar las vistas de lo que nos acababamos de meter en las piernas. Luego, a Cercedilla, a recoger al tío de las ampollas, que junto a Maribel, nos estaban esperando en la plaza del pueblo. Hoy no tocaban cañitas, que entre unas cosas y otras, estábamos en el parking del curro a las 19:45, mi mujer me va a cortar los huevos... aunque bueno, luego se ablanda y nos hace hasta unos calditos.

Bueno que ya me he cansado de escribir, menos mal que tengo tiempo... no os voy a decir donde lo he escrito, porque queda un poco mal y luego no sabes quien lee esto... sobran comentarios. Que nos vemos en la cumbre y que la semana que viene más y seguro que mejor. Un abrazo a todos.

PD: Lucas, atate bien los cordones, subete bien los calcetines y tira a tomar por culo esas putas botas y gastate el dinero en unas buenas Cabronazo... un abrazo a todos.

viernes, 8 de octubre de 2010

MALICIOSA (Desde la Pedriza) - BOLA DEL MUNDO - NAVACERRADA

DISTANCIA RECORRIDA: 17 km y medio según GPS. TIEMPO EMPLEADO: 4 horas y media, incluyendo pequeñas paradas, pero sin contar el tiempo de comida en la maliciosa. DESNIVEL POSITIVO ACUMULADO: ni más ni menos 1330 metros PUNTO MÁXIMO DE ALTURA ALCANZADO: 2265 m. en Bola del Mundo (2227 m en Maliciosa)

"Como la Maladeta en los Pirineos, La Maliciosa en la Sierra de Guadarrama es la maldecida, cuya roca siempre desolada y desnuda recibe los ataques del viento, hielo, agua y sol".
No sé porqué, pero he de confesar que ne cuesta empezar a escribir... y teoricamente no me debería costar ni lo más mínimo, porque la salida fue la hostia. Quizás por eso me cueste tanto, no sé si voy a estar a la altura de contar la experiencia que pasamos.

A priori, puede parecer una salida como cualquier otra, pero los que fuímos sabemos que no es así. Tuvo todos los ingredientes que hacen grande una ruta como esta: buen y mal tiempo, dureza, experiencia, comida gratificante de altura (incluyendo caldito), cansancio y esa sensación de victoria después de haber coronado dos grandes de nuestra preciada serranía...



Normalmente sigo un órden cronológico de los acontecimientos para narrar nuestras salidas y la verdad, es que es dificil no hacerlo, pero a pesar de ello voy a intentar darle un tono más literario a esta entrada, creo que la ocasión lo merece. Además, alguien me comentó en la salida una cosa, que me ha hecho freflexionar, yo pensé que este blog era una más de mis "frikadas", pero cuando Toni me dijo que esperaba como un niño chico, a que yo publicase la entrada para echarla un ojo, me di cuenta de que este blog, significa algo más. Lo primero, es la ilusión que yo le pongo cada vez que regresamos de una de nuestras andanzas y si a esto le sumamos, que alguno de vosotros, le ponga una pequeña parte de esa ilusión a la hora de leerlo, es más que suficiente. Si además pensamos que alguien ajeno a nosotros, pueda leerlo y que eso sirva para que se despierte ese "germen montañero" que algunos tenemos... pues más que de sobra, para que siga poniéndole el mismo empeño que siempre.



Los elegidos de esta semana fueron: El gran Jon, Jorgito y su par de huevos, con los que sube al Everest en manga corta, Toni, que no se pierde una, el nuevo fichaje galáctico Dani y un servidor. Bueno y nuevamente nuestros dos mejores amigos Uke y Odín.



Para esta salida se necesitaba algo más de logística: Comida un poco más potente, había que tener en cuenta que sobre las 14:00 íbamos a estar en plena faena y que por lo menos hasta las 18:00 no estaríamos (si así se terciaba, que ya os digo que no) en el Campo Base. Además otro dato a tener en cuenta es que la ruta elegida, no era ni circular, ni de ida y vuelta, es decir, que empezaba en el Parkin de Quebrantaherraduras, en plena Pedriza y terminaba en Navacerrada. Así que había que dejar primero un coche en Navacerrada y luego regresar a la Pedri.



Desayunamos en el bar más concurrido del pueblo de Manzanares, que se esta convirtiendo en el "oficial". Hay que ver como "los tienen" en los pueblos fríos de la sierra... cuando en esta zona de Madrid, ya hace un tiempo que nos hemos despedido de las terracitas, ahí estaban cuatro "marujas", con sus bebés, desayunando en la terraza, donde yo creo que apenas se superaban los 10 º de temperatura... Luego, superados los escollos de la logística, bueno y después de que Toni y Jon vinieran a recogernos en la primera y única pérdida del día, nos pusimos a la faena.



Hace algún tiempo, me encontraba con unos amigos realizando una actividad (que no os contaré, para que no me volvaís a poner de freak) junto a un grupo más grande de personas. Recuerdo que seríamos unas 200 personas en total, en una campa de montaña al aire libre... pues bien, se puso a llover, bueno, ni siquiera se le podía llamar llover. Unas cuantas gotas, fueron suficientes para que en apenas 15 minutos, yo y mis amigos, nos quedásemos sólos en aquella explanada. Pasada media hora, se quedó un día de lujo y ahora, sin agobios, pudimos disfrutar de un buen día de montaña. Os preguntaréis porqué cuento esto. Pues porque algo parecido nos pasó el otro día. Os fijasteis en cuántas personas nos cruzamos a lo largo del día. El de la panza gigante con su "pareja" y el colega que estaba sólo en la cumbre de la mali, cuando llegamos nosotros. Cuando las condiciones se ponen feas (o adecuadas, según mi punto de vista) los domingueros no salen de sus monovoulmenes, es más, a veces ni siquiera se acercan a la sierra. O sí, como los que vimos en el puerto de navacerrada, que como bien dijo Jon, ya podían contar que habían estado en la montaña (con vaqueros y zapatos, bajarse del coche y meterse en el bar Dos castillas).



Sobre las 14:15, coronamos Maliciosa, no fue la cumbre más alta de la jornada, pero joder, sin duda la más dura. Desde Quebrantaherraduras, ni más ni menos que 1339 metros de desnivel positivo acumulado. Rampas con una dureza que flipas, como aquel primer cortafuegos, corto pero intenso o las interminables revueltas en forma de Z... madre mía, no me quiero ni acordar. El último tramo casi a trocha, veías tan cerca la cima, pero no llegaba nunca.



Dejamos las mochilas, nos pusimos ropa seca y acometimos juntos el último piquito de la cumbre. A esas alturas uno no tiene miedo de que le quiten las cosas (no es que sea imposible, no me malinterpreteis), pero es muy dificil que alguien que se haya metido esa paliza, ahora vaya y te quite unos euros o una mochila. Por cierto, queda pendiente hacernos una banderita de esas que se sacan en las cumbres con la leyenda "PAPA LIMA SIERRA" y por detrás una frasecita con mensaje, que por educación no repetiré en estas líneas, bueno, más que por educación, por si acaso alguien non grato, por casualidad este blog.



Después de las fotitos de rigor, una comidita más relajada y copiosa que habitualmente. nos acomodamos bien, saqué mi caldito que todavía estaba calentito en el termo y del que por cierto, ya le he dado las gracias a Loli. Yo, que me había propuesto darle un toque aún más montañero al asunto, saqué mi infiernillo y me calenté un poquito de pasta. Ya sabéis que el atrezzo es fundamental y cocinar en altura es básico jajaja.



La cumbre de Maliciosa, sólo se nos mostró una vez, como si la montaña se riera de nosotros y despejase su niebla (o efecto föhn) por un instante para recordarnos lo que aún nos quedaba y de hecho, a partir de ese momento, fue bajo mi punto de vista, la parte más dura de la ruta, la podías casi tocar, pero la Mali, no llegaba.



Después de la comida, sólo nos quedaba descender al collado del viejo pluviometro (2074 m.) y de ahí, por un camino bien marcado, que parecía corto desde la cumbre de Maliciosa, llegar a la Bola del mundo. El camino si bien marcado, pero de corto nada, otros casi 200 m. de desnivel entre pecho y espalda. Fue una dura subida, que a mí se me antojo larga, muy larga, quizás algo más lanzado y no tan empinado como los anteriores, pero los 14 Km. pesaban en las piernas y al que no le daba un tirón, le daba un calambre o no le respondía la rodilla ¿no Toni?



En la Bola, como se puede apreciar en los videos, la niebla, no nos dejo ver apenas nada, aquí os dejo un enlace, para que veaís lo que no pudisteis ver. Parece mentira que eso estuviese ahí y que no lo apreciasemos. La sensación de victoria de la que hablé al principio, también se puede apreciar en esos videos. Esos abrazos espontáneos, fruto de haber conseguido algo dificil. No es un ochomil, ni nada que se le asemeje, pero para nosotros es casi lo mismo, el afán de superación, el sufrimiento... eso es lo que te regala la montaña.



En el descenso, poquito a poco, nos fue mejorando el tiempo y pudimos ir viendo por donde subieron los ciclistas en la vuelta, no me extraña que se dopen, madre mía, menudas rampas. Después ya sabéis lo que toca, estiramientos, ropa seca y a tomar "un coca-cola". Allí en el "Dos Castillas" vimos otro ejemplo más de los "antidomingueros", cuatro máquinas, que se acababan de meter en las piernas la subidita al Puerto de Navacerrada en bici... dos de carretera y dos de montaña, ni más ni menos y con un tiempo de perros... ah y por cierto, nada de burras de mil pavos, dos hierros que flipas. Veís como de nada sirve una bici mileurista en el trastero



Bueno, que poco más que contar, que esta vez nada de Cruz Blanca, que teníamos que hacer de buenos padres y maridos... que esto no para, que va a más, que el germén montañero se nos ha metido dentro y que... NOS VEMOS EN LA CUMBRE



PD: hablando del atrezzo, Dani, sólo una cosa, unos parchecitos en las rodillas jajaja: "añadir a la cesta".

VIDEO-RESUMEN ASCENSIÓN AL MONT BLANC

VIDEO-RESUMEN DE ASCENSIÓN A ANETO

CUMBRE DE MONTÓN DE TRIGO

EL CREADOR DE ESTE BLOG LLEGANDO A LA CUMBRE DE MONTON DE TRIGO

MALICIOSA INVERNAL (Cara sur)

PEQUEÑA GRUTA DE LA PEDRIZA

CUMBRE DE PICO EL NEVERO

VOLVIENDO DEL PICO DEL NEVERO

ASCENSIÓN A PEÑA EL AGUILA